WILLIAM HENRRY (Seattle, 28 de octubre de
1955), más conocido como BILL GATES, fascinado ya desde sus doce años por la
informática y teniendo la suerte de estar en una de las pocas escuelas que
contaba con un computador, se emprende en varios proyectos de programación
mientras estudiaba. Hasta que en el 4 de abril de 1975, siendo ya estudiante
de Harvard, funda la empresa MICROSOFT
junto con su compañero Paul Allen, lo que lo llevaría a dejar la universidad en
1976, para dedicarse por completo a MICROSOFT,
teniendo el gran sueño, no muy lejano, de que EN CADA CASA Y EN CADA
DESPACHO HUBIERA UN ORDENADOR. WILLIAM fue uno de los pocos quienes verían un
nicho sin explotar en la creación de los SOFTWARE, otro muy conocido y
principal competidor de Gates sería Steve Jobs. En ese entonces las empresas
interesadas en la creación de ordenadores creían que el principal beneficio
económico, la mayor ganancia, provendría del HARWARE y NO DEL SOFWARE. Una de
estas empresas sería IBM, quienes serían los primeros en usar el MS-DOS
(MICROSOFT DOS), prototipo de lo que sería más adelante el MICROSOFT WINDOWS.
El éxito y repercusión de este sistema operativo, MICROSOFT WINDOWS, harían de
BILL GATES el hombre más rico del mundo, convirtiéndolo en la duodécima persona
más rica en toda la historia de la humanidad. Presidente y director ejecutivo
de MICROSOFT, desde sus 31 años ya era multimillonario.
Es importante aclarar que GATES no fue el
creador original del prototipo del MICROSOFT WIMDOWS. Justo en el momento en el
que la IBM le requería de un SOFWARE, GATES logró venderles un sistema
operativo con el cual aún no contaba en sus manos. Unas semanas después hecho este
trato, BILL le compró a TIM PATERSON, un ingeniero informático, el
sistema operativo QDOS por 50 MIL DOLARES, sistema que luego vendería a la
IBM como MS-DOS (MICROSOFT DOS), uno de los principales antecedentes del MICROSOFT
WINDOWS. Este hecho sería un punto muy fuerte de críticas posteriores a GATES, acusándolo
de aprovechador y de tener en realidad poca creatividad. Pero, aun admitiéndolo,
se le debe reconocer su visión empresarial y su contribución a la popularidad
de la informática.